El género del bonsái es uno de los aspectos más relevantes a la hora de considerar a estas plantas. La razón de esto es simple, pues sucede que las plantas se clasifican tanto en género como en especie.
En tal sentido, lo primero que debemos hacer es aclarar el significado del vocablo género dentro del marco de la biología. Sucede que el género es una categoría taxonómica que resulta más amplia que la relativa a las especies. Dicho en otras palabras, dentro de un mismo género se agrupan diversas especies. Además, todos los organismos vivos que pertenecen a un mismo género comienzan su nombre científico con el apelativo de dicho género.
Para ejemplificar lo antes señalados, hacemos referencia a una planta muy usada en el sector del bonsái. Nos referimos a los ficus. En tal sentido, hay que indicar que el género de organismos vegetales llamado Ficus tienen una enorme cantidad de especies repartidas alrededor del mundo.
Algunas de las especies de ficus más conocidas son las siguientes: Ficus Aurea, Ficus Altissima, Ficus Benjamina, Ficus Microcarpa, Ficus Pilosa, Ficus Virens, Ficus Religiosa, Ficus Macrocarpa, Ficus Druces, y muchas otras hasta completar un total de 830 especies en total. Es una cantidad bastante grande. Nosotros contamos en nuestros viveros con las variedades del Ficus Retusa y Ficus Carica, ya que son las más adecuadas para el bonsái.
La noción de género botánico reviste importancia. En primer lugar, sucede que los géneros de organismos vegetales más recomendados para el bonsái son aquellos que tienen las hojas pequeñas. Esto se debe a que esta característica les da una escala adecuada para ser sembrados en macetas y simulen árboles reducidos. Bajo esta premisa, los mejores géneros son Arce, Pinus, Ulmus, Rhododendron, Ficus, Olea, Juniperus, Malus y otros más.
Otro factor de relevancia en el género de las plantas es su adaptación a diversos climas. Por lo general, todas las especies que integran un género crecen en ámbitos climáticos similares. Verbigracia, los árboles del género Pinus (pinos) se dan en ambientes de índole templada y no son los mejores para sitios tropicales.
También podemos decir que, en el caso de España, resultan ideales los árboles del género Olea (olivos) ya que son propios del entorno mediterráneo. El género de plantas conocido Citrus (naranjeros y limoneros) también son perfectos para un ambiento como el del territorio español. Por su parte, los Ficus son bastante versátiles, pero en realidad son de climas tropicales y no resisten las bajas temperaturas en épocas de invierno y tampoco las sequías.
Asimismo, es relevante elegir el género de la planta si apenas se es un principiante en asuntos de árboles de reducido tamaño.
Esto se debe a que hay variedades de árboles más resistentes que otros a la hora de ser trabajados como bonsái. En general, lo mejor es iniciar con plantas resistentes a la manipulación, que crezcan con relativa rapidez, que sean fáciles de alambrar y que sean de sencillo cultivo en macetas.
Teniendo en cuenta lo antes dicho, se puede afirmar que un buen género de árboles para emprender en el mundo del bonsái es el de Ficus, pues reúne varios de los sesgos antes descritos. Igualmente, son bastante recomendables los géneros de plantas siguientes: Buxus, Ligustrum, Acer, Fagus, Malus, Ulmus y los Juniperus.
Nosotros sabemos la importancia del género a la hora de elegir un bonsái. Por eso, podemos asesorarte para que compres la planta que mejor se adapta a tus necesidades. Además, te vendemos las herramientas necesarias para cuidar tu árbol, como los tiestos, tijeras, regaderas y muchos más. Te ofrecemos una atención y servicio completo, con mucha experiencia y profesionalismo.